martes, 14 de febrero de 2012

semillita, dor mi di dón, dormi Do Mayor

Cayó como bolsa de plumas, golpe seco, pero no áspero. Fruto seco que fue pájaro por unos minutos.Ya a esa hora había dejado de escuchar la canción del mar, porque cuando la cabeza duerme, es el resto lo que se desprende, lo que es más tuyo, y tan tuyo porque nunca lo vas a tocar, esta en el aire de inverno ese momento efímero en que lo notas
- ¿te atrapé! no ves, acá está-.
Entre cada ola, el mar depreda la costa, humedeciendo las plantas del pie, achicharrando esa piel, que el viento no puede dejar en paz. No encontré orilla, pero estoy dentro , las paredes humedad del viento marcan tu pared, saliste para que esa cosa que llamas cuerpo, quede mutilada en un colchón.
- No te acordas, me imagino, si lo haces todas las mañana-
Dormido, dor mi di t t o, dormi dón, con algodón debajo de la cabeza, para la humedad del alma, ya que cada día somos una planta en germinación;
- Las raíces por favor, debajo de la cama-.

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