domingo, 15 de abril de 2012

El zapato izquierdo



Ya suena aburrida esa poesía, que todavía no se desgasta.
Solo se quiebran las palabras de buenos días , ya no se toquetea
ni al caballo rojo , solo está.
Desde un precipicio se van las expresiones de asco, que suenan dulces
como una canción de destierro , pero uno bien grande
para que después las sabanas viejas vuelvan a concordar algún día
sobre una misma cama, por un mismo cuerpo.
Por ahora, solo hay que convinarlas, si son rayas, rayas
si estás mal, estás blandita, si es frió es frío.
La campera polar está cocinada en el placar, con unos clavos por fuera,
estoy domando los conejitos que me salen de las medias, para no morderte la mano.

Pero acá no hay sombras, acá ya casi no hay nada
me afanaron hasta el velador,pero a mi me gusta más el tono de la vela
el tono del principio con piscas de azul en el corazón.
Yo te plantaba las flores, hasta la punta de los pelos si podía,
hasta el más oscuro marrón si me alcanzaba ,
si es que la repisita no se te cae en la cabeza
son muchos libros, para una carta.

Me da vergüenza cuando te pones así de húmeda , 
te ablandan las tripas, y nace un jardín de pájaros muertos
de palabras estúpidas, y egos pelotudos.
No hay que decirte nada a vos, ni darte las gracias
-¿Qué querés?
El cuarto te queda chico para los juegos de mesa
la edad te queda grande en la sombra gorda
solo que no te gusta mucho.

Lo destiñe la decadencia, todo lo destiñe.
Mujer sos terrible , a veces dejas que te coman la pansa
solo por un palabrerio que alimenta al perro

Yo quiero que sepas que vos no sos el perro, ni la puta perra.
que no te atrapen por un poco de miel, vos dejalos
como me dejaste a mi, a ellos también los vas a dejar a ellos.

Después nadie te va a conocer, mudaste de piel, de barrio ,de olor.
Ojalá que sea así, aunque tenga que odiarte, y no quererte tanto
No quiero que te conviertas en pasto, no sos el yuyo en mi jardín
no te quiero así , tonta, te pones como una nena.

Vos sos un manjar mujer, uno ácido, blandito con terminaciones dulces.
El pasto crece en cualquier lado, el pasto siempre deja de ser lindo
solo pasa a ser el pasto, ya no se le ve lo lindo, es tan insulso como lo que pisamos.


Ojalá que te cruce florecida en un río, donde te floten los pelos.
Te prometo un lugar junto al árbolito , 
que no te maten antes, que no te amarren.



Con tacos así , trota suave-cito, que te quiero linda.




1 comentario:

  1. Sin palabras, me moviste todo. Me encantó. Usaste las palabras exactas, gracias por eso

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